Puede ser controlada cuando la persona adopta una actitud positiva y mantiene un buen control de su salud sin estrés
- Signos más frecuentes de la colitis nerviosa, están: episodios de diarrea o estreñimiento; presencia de gases intestinales; dolor y distención abdominal
El estrés de la vida cotidiana, así como la mala alimentación desde temprana edad, son los principales causantes que originan colitis nerviosa, denominada Síndrome del Intestino Irritable (SII), el cual afecta a una gran parte de la población que no se incluye en una vida activa y saludable, informó el coordinador de prevención y Atención a la Salud del IMSS Guerrero, Jesús Roberto Valdez Ortiz.
Considerado actualmente un padecimiento común, debido a la vida sedentaria y al poco interés de la población por una buena alimentación, indicó el médico, quien reconoció que el trastorno daña la función del sistema digestivo, principalmente el colón.
La función principal de esta parte de nuestro organismo es la absorción de agua, para mantener un equilibrio en la hidratación y almacenar desechos. Diariamente, estos últimos son empujados para ser eliminados del organismo a través de la defecación.
Explicó que el colon mide entre 1.5 y 2 metros de largo, conectando al intestino delgado con el recto y el ano, por lo que su buena función es fundamental para todo el proceso que lleva a cabo.
Mencionó que la colitis nerviosa puede ser controlada cuando la persona adopta una actitud positiva y mantiene un buen control de su salud sin estrés, ya que un estado emocional alterado reduce la capacidad del organismo para expulsar la materia fecal, provocando que ésta se mantenga en el cuerpo ocasionando una respuesta inflamatoria del colon.
Entre los signos más frecuentes de la colitis nerviosa, están: episodios de diarrea o estreñimiento; presencia de gases intestinales; dolor y distención abdominal que se alivia al evacuar; sensación de estar lleno; vómitos; mareos; pérdida del apetito e inconsistencia de las heces fecales (muy duras o muy blandas).
Así también, el consumo de azúcar, café, chocolate, grasas animales, picantes, alimentos muy condimentados, bebidas gaseosas o algunas leguminosas y productos lácteos; las horas prolongadas de ayuno; no tomar suficiente agua, y el sedentarismo puede agravar este padecimiento.
Una recomendación para la persona que ya presente colitis nerviosa es evitar los ayunos prolongados, mejorar su dieta y establecer horarios para comer e ir al baño. En caso de que no desaparezcan las molestias en un periodo de dos a tres días, debe acudir al médico y no automedicarse, lo cual, señaló es muy habitual entre la población.
Valdez Ortiz recordó que los buenos hábitos son la principal herramienta de la prevención, por tal motivo, insistió, en la necesidad de acudir regularmente con los médicos familiares y los módulos de medicina preventiva PrevenIMSS.
El coordinador de Medicina Preventiva destacó que para ésta y el resto de las enfermedades es contraproducente la automedicación, lo adecuado es visitar al médico, ya que consumir medicinas no prescritas puede generar efectos secundarios.
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